Después de haber pasado por las falacias que intentan manipular la mente, las emociones o el contenido del argumento, revisamos aquellas que atacan directamente al oponente para ganar el argumento. Parecería que el mundo de las falacias retóricas está lleno de personas deshonestas que intentan hacer pasar lo lógico como posible y lo falso por cierto. Sin embargo no siempre es así. En esta entrega veremos el primer tipo de falacias que ocurren cuando el que las emite no es precisamente “el más brillante de la clase”.
Distorsión de “causa y efecto”
Afirmar lo consecuente
Asumir que existe solo una explicación para la observación que se está haciendo.
“El matrimonio muchas veces produce hijos. Entonces, esa es la única razón por la que existe.”
Lógica circular
Se deriva una conclusión de una premisa basada en la conclusión.
“Eliminar el derecho a la privacidad solo es relevante para aquellos con algo que ocultar. Debes tener algo que ocultar si te preocupa que eliminen el derecho a la privacidad.”
Correlación no implica causalidad
Pretender que dos eventos que ocurren juntos deben tener una relación de causa y efecto.
“Los adolescentes con ropa apretada suelen abusar del alcohol. La ropa apretada promueve el alcoholismo.”
Negación de antecedentes
No existe una sola explicación para cualquier resultado. Así que es falso asumir la causa basada en el efecto.
“Si vas a la universidad serás exitoso. Si no vas a la universidad no serás exitoso.”
Ignorar una causa común
Pretender que un evento ha causado otro, cuando otro más (que se pasa por alto) sería una causa más probable.
“Siempre que veo botellas vacías tiradas por la carretera veo también accidentes. Seguramente los conductores se aburren e intentan atinarles. Quizá.”
Falsa causalidad
Pretender que porque un evento sigue a otro, también fue causado por éste.
“Hoy, al fin, encontré casa nueva. Justo como lo predijo mi horóscopo.”
Doble falta
Asumir que si un error es cometido, otro error lo cancelará.
“Todos roban dinero de la caja, no tiene nada de malo que yo también lo haga.”
Sellek Daniel